El mármol es una de las rocas o piedras ornamentales más apreciadas, ya que al ser pulida presenta unas características cromáticas y decorativas muy llamativas. Además, tiene unas propiedades de resistencia muy adecuadas para ser utilizada en construcción.
Las rocas metamórficas se generan a partir de rocas preexistentes que, como consecuencia de sufrir un aumento importante de temperatura y de presión por procesos geológicos, se ocasionan cambios en sus minerales y composición química de modo que la roca original (sedimentaria, ígnea o metamórfica) se transforma en un nuevo tipo de roca, que llamamos roca metamórfica.
Desde el punto de vista de las artes, el concepto de mármol se establece según su apariencia, siendo ésta como la de las rocas metamórficas que son susceptibles de un pulimento fino, el mismo que se observa al apreciar esculturas de este material.